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Origen y significado del apellido ORTIZ
Apellido castellano de la montañas de Burgos, desde donde se extendió por toda la Península.
Aparece este apellido en tiempos remotos, y en opinión de algún autor es apellido mozárabe de Toledo, según se deduce de la Copia de la Bula de la Confirmación de la Concordia entre Latinos y Mozárabes, del Pontífice Julio III, nonas de Marzo de 1553. Otros testimonios aseguran que era familiar entre los mozárabes de aquella ciudad a poco de haber sido reconquistada por el Rey don Alfonso VI de Castilla.
En el año 1167 desempeñaba el cargo de Alcaide de Toledo don Orti Ortiz, y hay datos que comprueban que sus descendientes, en distintas ramas han existido en la Imperial Ciudad, sin interrupción en los siglos, hasta nuestros días.
Sería, sin embargo, muy aventurado aplicar esa procedencia a las numerosas familias Ortiz que se extendieron por todas las regiones de España.
El nombre del mencionado Alcaide de Toledo acusa carácter patronímico en este apellido, y también lo corrobora el haber llevado ese mismo nombre propio en la antigüedad otros caballeros que ninguna relación de origen ni de parentesco tenían con aquel.
Otra versión le atribuye un origen tan notoriamente fabuloso, que no merece ser reproducido. En realidad quedan ocultos su arranque y formación, si se prescinde de considerarle como apellido patronímico, que es, sin duda, la calificación que, le corresponde. Lo cierto es que desde tiempos antiguos se difundió por todas las regiones de España y que muchas de las numerosas familias Ortiz no tienen común origen ni proceden de un mismo primitivo solar y tronco. Por el contrario; son tan varias y dispares sus procedencias, que no existe entre la mayoría de ellas ningún vínculo de parentesco, ni la más leve y pretérita comunidad de sangre.
En su estudio seguiremos las mismas normas observadas en las informaciones de otros apellidos de análoga naturaleza, concretándonos a recoger primeramente, y con la debida diferenciación, algunas de las muchas familias Ortiz (sería imposible recogerlas todas) notoriamente hidalgas y que usaron ese apellido sin unirlo al de otro linaje en apellido compuesto.
La evolución de su patronímico, Fortuniz, a Fortún, Ortún o Fortunio dio lugar a los apellidos Fortunez, Fortuniz y Ortiz, durante los siglos VII al X.
Informa Piferrer que unos dicen que procede de los Duques de Normandía por dos hermanos apellidados Orti que vinieron a pelear en España. En esta conjetura, porque no pasa de ser tal, se trasluciría la analogía de la "estrella" o "lucero" de las armas de este apellido con la estrella del Norte, y la de esta palabra con la de Normandía que significa país habitado por los hombres del Norte.
Otros pretenden que un caballero del apellido Ortiz, Caudillo o Capitán General de una provincia, de quien proceden los Ortiz del valle de Carriedo y de Espinosa de los Monteros, por estar en continua observación de las fronteras del Norte, y por eso puso la referida estrella en sus armas.
Los Ortiz, se remontan a Florencio Ochoa Ortiz, en los años 700 como partícipe de la batalla de Guadalete. Otros ascendientes, del linaje del valle Oquendo, intervinieron en las de Clavijo y Roncesvalles.
En el libro de "Los Señoríos y Reinos de España", del citado autor, se incluyen estos versos, escritos por el genealogista Baños de Velasco, sobre el linaje Ortiz.
Vi el Ortiz generoso
Venir con muy gran denuedo
Muy valiente y animoso
De linaje valeroso
Y pobló el val de Carriedo
El cual venía de la línea
Del primer Duque normando
A socorrer a Castilla
Con el Norte relumbrado.
Los datos que se poseen, con rigurosidad histórica, marcan el año 1.014, como la fecha en que García Ortiz confirmó una donación en su calidad de ricohombre del rey de Navarra, don Sancho IV. En 1.214, Ortún Ortiz confirmó otra donación también como ricohombre y merino mayor del rey de Castilla don Alfonso IX. Todo esto confirma que, en efecto, el linaje Ortiz es muy antiguo y prestigiado en España. Es uno de los apellidos más antiguos de Castilla y extendido en los demás reinos de España, con sus peculiaridades según la región, denominándose Ortí, Ortis, Ortiza, etc. Desde el siglo XII, hay constancia de familias Ortiz en Villacarriedo, Santander y en el valle de Mena y Espinosa de los Monteros en Burgos. Parece ser que sus más antiguos solares radicaron en Aragón, Navarra y Señorío de Vizcaya.
Hay datos también sobre otro Ortiz que, en tiempos del rey don Jaime, peleó valerosamente contra los moros, por lo que fue nombrado Maestre de Campo en el sitio de Burriana.
En la conquista de Sevilla participó don Pedro Ortiz, distinguiéndose, en los combates que precedieron a la toma de esta ciudad, por su valor y arrojo demostrado en el campo de batalla, sobre el año 1.248.
Un nieto suyo, don Alonso de Ortiz, fue Comendador de la Orden de Santiago casó con doña Mencía de Zúñiga, de la cual proceden los Marqueses de MonteFuerte, emparentando así con otra casa de ilustre y preclaro linaje.
Don Juan Ortiz de Zúñiga, quinto nieto que fue de don Alonso Ortiz y duodécimo nieto del anteriormente expresado conquistador de Sevilla, fue caballero de la Orden de Santiago, Veinticuatro Perpetuo de Sevilla y primer Marqués de Monte-Fuerte, por merced del rey Felipe V, otorgado en el año 1.702.
Otros miembros de este apellido fueron don Juan Ortiz, caballero de Santiago don Diego Ortiz, asimismo caballero de la antes citada Orden, don José Ortiz de Zúñiga y Santillán, segundo marqués de Monte-Fuerte, Conde de Lebrija, Veinticuatro Perpetuo de Sevilla.
En la larga, larguísima lista de aquellos del apellido Ortiz que han destacado en la historia, podemos encontrar a Francisco Ortiz de Vergara, conquistador, nacido en Sevilla en el siglo XV, que estuvo en el Río de la Plata, a las órdenes del Adelantado Alvar Nuñez Cabeza de Vaca hasta que este fue depuesto del mando.
Al ser nombrado Adelantado Martínez de Irala, Ortiz que era hombre fiel al depuesto Cabeza de Vaca, conspiró contra él, pero el asunto no tuvo graves consecuencias (y decimos esto porque ya se sabe que la mayoría de aquellas conspiraciones acababan generalmente con la ejecución de alguien, y basta
recordar a Nuñez de Balboa y Diego de Almagro, entre otros) y no sólo no redundó en perjuicio de Ortiz, sino que éste acabó casándose con una hija de Martínez de Irala y cuando éste murió, su sucesor, Gonzalo de Mendoza, le nombró Capitán General y Justicia Mayor, pero estos títulos no le fueron confirmados por la Corona.
Envuelto en nuevas intrigas, fue apresado en Chuquisaca y nombrado en su lugar otro Ortiz, en este caso Ortiz de Zárate, de quien pasamos a ocuparnos seguidamente: Juan Ortiz de Zárate, nacido en Orduña en 1.526, pasó a Perú, en 1.534 y como partidario de Diego de Almagro tomó parte en la batalla de las
Salinas. Más tarde se unió a Diego Centeno contra Gonzalo Pizarro en Charcas, hasta que vencido por Carvajal, huyó a Quito y allí permaneció hasta la llegada de La Gasca. Residió después en Chuquisaca donde llegó a ser uno de los vecinos de más fortuna. Ortiz de Zárate ambicionaba el gobierno del Paraguay y llegó a ser Gobernador y Capitán General del Río de la Plata, al ser depuesto Ortiz de
Vergara, con el encargo de poblar el extenso territorio. De regreso a España, a donde había ido a confirmar su título volvió a las Indias para organizar nuevas expediciones, llegando hasta el estuario del Plata y al año siguiente se cumplió su ambición de obtener el gobierno del Paraguay, residiendo en la capital Asunción donde murió.
Los personajes más destacados que se relacionan con este apellido son: Fortúm Garcés, rey de Sobarbe; Fortum Zuria, señor de Vizcaya (siglo VIII), doña Toda Fortuniz, hija del gobernador de Nájera, Fortún Garcés (1.053). En 1.149, según los Anales Valencianos, vivió Ortum Ortiz hijo de Garcés Ortiz ricohombre de Aragón. Ortúm Ortiz, (1.167), alcalde de Toledo. Ortún Ortiz Calderón, en la conquista de Baeza.
DIVERSAS Y ANTIGUAS CASAS DE ORTIZ EN CASTILLA Y LEÓN
Entre las casas de Ortiz en esta región figuran las que radicaron en: Bañuelos de Bureba, Briviesca, Burgos, Cadagua, Cueva Cardiel, Espinosa de los Monteros, Gobantes, Lences, Medina de Pomar, Poza de la Sal, Salas de los Infantes, Taranco, valle de Mena, Villaluenga y Zangández (Burgos); Riaño (León); Masueco y Villanueva del Conde (Salamanca), y Medina del Campo (Valladolid).
EN EXTREMADURA
Muy noble y principal era la rama de Ortiz de la casa del valle de Carriedo que pasó a Extremadura y creó nuevo solar en Almendralejo (Badajoz). Otra casa hubo en Medellín, de la misma provincia.
Según Ortiz de Zúñiga, el origen de los Ortiz es de los duques de Normandía y parte, en España, de los solares mencionados, siendo el de Carriedo el que se extendió por Andalucía y Extremadura en donde podemos encontrar múltiples muestras de sus asentamientos.
En Quintana de Serena, existen dos casas solariegas de los Ortiz, una cuyo origen se remonta a Juan Ortiz Quintana allá por el 1.600, y cuyo blasón cruza sus armas con las del Cardenal Siliceo. De esta familia, con ejecutoria de nobleza, de la Real Chancillería de Granada del 1.604, descienden los Ortiz Coronado actuales.
EN EL PAIS VASCO
Dos casas de Ortiz, antiguas e infanzonas hubo en Vizcaya; una en el lugar de Santecilla, del Ayuntamiento de Carranza, y otra en el valle de Gordejuela, ambas en las Encartaciones. Y otra casa de Ortiz hubo en el valle real de Laminoria (Alava).
En Vizcaya hubo dos casas de este apellido: una muy antigua e infanzona, en el lugar de Santecilla, del Ayuntamiento de Carranza, y otra en la villa de Gordejuela, ambas en el partido de Valmaseda.
De la casa del lugar de Santecilla fue Juan Ortiz de la Torre, que casó con doña María Cano Santisteban, y fueron padres de Tomás Ortiz y Cano, bautizado en Santecilla el 26 de Mayo de 1684, que contrajo matrimonio con doña Micaela de las Heras, a la que hizo madre de Juan Ortiz de las Heras, bautizado en Santecilla el 10 de Noviembre de 1720, que celebró su enlace con doña María López, y procrearon a Antonio Ortiz y López, bautizado en Santecilla el 8 de Julio de 1742, que tuvo por esposa a doña Josefa de la Sierra, y fueron padres de Juan Ángel Ortiz de la Sierra, bautizado en Santecilla el 6 de Marzo de 1780, vecino de Madrid y Tesorero de los Santos Lugares de Jerusalén, que el 18 de Agosto de 1817 obtuvo declaración de vizcainía en la Real Chancillería de Valladolid.
EN NAVARRA
En Navarra hubo una casa solar documentada en el año 1309.
Casa de Ortiz hubo en el Valle Real de la Minoria (dice la Nobleza Executoriada de Navarra), pero debe ser de Laminoria, en Álava, y de ella procedieron Pedro, Benito y Blas de Ortiz, que en 1742 fueron reconocidos como nobles por los Tribunales de Navarra.
EN VALENCIA Y ALICANTE
Martín de Viciana, en la "Segunda Parte de la Crónica de Valencia", cita a varios individuos de esta familia Ortiz valenciana que residieron principalmente en la ciudad de Valencia, en la villa de Torrente, de esa provincia, y en Elche y Novelda (Alicante).
Muy antiguo es el apellido Ortiz en Valencia.
Mosen Jaime Febrer cita a Rodrigo Ortiz que sirvió a don Jaime I de Aragón en la conquista del reino de Valencia, y del que refiere que, capitaneando la gente de Teruel, estuvo en la rendición del castillo de Arés (Castellón de la Plana ) y en el sitio de la villa de Burriana, de la misma provincia, siendo nombrado allí por el rey maestre de campo. De Burriana pasó al Puig y a Valencia. Murió en Almoradi, villa de la provincia de Alicante, con fama de soldado valeroso. Un hijo suyo fue hecho cautivo en la ciudad de Granada.
Martin de Viciana, en la Segunda parte de la Crónica de Valencia, cita a varios individuos de esta familia Ortiz valenciana que resistieron principalmente en la ciudad de Valencia, en la villa de Torrente, de esa provincia, y en las ciudades de Elche y Novelda, de la provincia de Alicante, y afirma que todos ellos eran caballeros descendientes del antiguo linaje militar, según consta de legítima probanza hecha ante el juez ordinario de Elche el 28 de septiembre de 11416, siendo admitidos en el brazo militar de las Cortes.
EN ARAGON Y CATALUÑA
El apellido Ortiz en Aragón es muy antiguo y de Ricohombres de mesnada de aquel reino. Entre las casas de este linaje destacamos las de Quinto y Tauste (Zaragoza), y la de Pilzán (Huesca). En Cataluña hubo en Barcelona y Concabella (Lérida).
Pasaron a Cataluña otras familias Ortiz originarias de Aragón y Castilla. Una de ellas tuvo casa en Barcelona, de la que se derivó una línea apellidada Ortiz Repiso, y a la que perteneció
I. Nicolás Ortiz Repiso y Galván, marido de doña Jacinta de Castilla, de la que tuvo a
II. Antonio Ortiz Repiso de Castilla, que casó con doña Juana, naciendo de esta unión
III. María Araceli Ortiz Repiso, que contrajo matrimonio con Domingo de Llinás.
EN ASTURIAS
En el Principado de Asturias tuvieron casas en Pando y en el Concejo de Colunga.
Hubo diferentes casas en Almagro y Almuradiel (Ciudad Real), y en Las Ventas (Toledo).
EN LA RIOJA
En la ciudad de Santo Domingo de la Calzada radicó una casa de Ortiz.
Muy nobles familias de Ortiz radicaron en Mojacar y Níjar (Almería), Quesada (Jaeé) y Sevilla..
EN AMERICA
Diversas líneas derivadas de las casas españolas difundieron el apellido Ortiz en América como son las establecidas en el departamento de Antioquia (Colombia); Argentina, Chile, Ecuador, México y Perú.
Nobleza
Probaron su nobleza para ingresar en la Orden de Santiago, en lo años que se indican: Alonso Ortiz de Abren y de Ojeda, natural de San Juan del Puerto (Huelva) en 1641; Francisco Ortiz de Artaza y de Pinedo, natural de Vitoria, Capitán de Infantería del Regimiento de Madrid, en 1707; Manuel Ortiz Cantón natural y originario de Poza de la Sal (Burgos) Capitán de caballos Alcalde Mayor de ciudad de Chiapa, en México, en 1755; Diego Ortiz y Capdevilla, natural de Concentaina (Alicante) y originario de Elche (Alicante), Guardia de Corps de la Compañía española en 1783; Bartolomé ortiz de cazqueta y Ballesteros, natural de Requena (Valencia), en 1687; Femando Ortiz de Céspedes, natural de Sevilla en 1676; Francisco Ortiz Cortes y Sánchez de Luna, natural de Bari (Ñapóles), en 1698; Pedro Ortiz de Escobar y Ruiz de Morales, natural de Sevilla, Capitán de Caballos y Veedor de la Real Artúlería de la ciudad de Sevilla y Ejército de Andalucía, en 1728 Pedro Dionisio Ortiz Fernandez y Villalobos, natural de Almendralejo (Badajoz), en 1750; Ventura Ortiz de Guinea, natural de Madrid, en 1789; Baltasar y Luis Ortiz y Ortiz de Moneada naturales de Toledo, en 1670; Rafael Ortiz y Pascual de Ibarra Guardia de Corps de la Compañía española, natural de Elche (Alicante), en 1782; José Ortiz de Navamuel Remírez natural de Madrid y originario de Lences
También probaron su nobleza para ingresar en la Orden de Calatrava: Francisco Ortiz y Gutierrez Barba.Hernandez y Hernández, natural y vecino de Almagro (Ciudad Real) y originario de Espinosa de los Monteros (Burgos), en 1531; Luis Ortiz Ponce de León de Sandoval de Guzmán, natural de Sevilla, en 1622; Antonio Ortiz Repiso Castilla Castilla y Navajas, Coronel retirado, natural de Lucena (Córdoba) en 1803, y Antonio Ortiz Riojano Eslava Guerra y Duran natural de Baena (Córdoba), en 1704.
En la Orden de Montesa ingresaron: José Felipe Ortiz y Caponi, Capitán retirado del Regimiento de las Ordenes Militares, natural de Cádiz, en 1803; Juan Francisco Ortiz y Caponi, Capitán del Regimiento de Infantería de Saboya, natural de Cádiz en 1807; Lamberto Ortiz y Juan Antonio, Regente de la Caballería del Consejo Supremo de Aragon natural.de Valencia, en 1643; Jaime Ortiz y Malla, natural de Elche, en 1694; Franriscon Luis Ortiz y Villarrasa Lluqui, natural de Valencia, en 1687, y Pascual José Ortiz y Pasqual de Ibarra, Teniente de Dragones de la Reina, natural de Elche en 1783.
También ingresaron en la Orden de Carlos III: Miguel Ortiz y Amor de la Sierra ; Morales, natural de Madrid y originario de Santecilla, del valle de Carranza (Vizcaya), Oficial de la Clase de Segundos del Ministerio de Gracia y Justicia, en 1842; Gabriel Ortiz de Cagiguera y Saivi Pérez Cano y Miguel, natural de Lérida Cronista y Rey de Armas de S.M., Oficial de la Secretaría de Estado, en 1783; José Ortiz de Cagiguera y Saivi Pérez Cano y Miguel, natural de Lérida, Secretario interino del Virreinato y de la Superintendencia de Real Hacienda de las provincias de Buenos Aires (Argentina), en 1793; Pedro Manuel Ortiz de la Riva y García de Santiago Pérez de Carrasquedo y de la Puente, natural de Jijano, del valle de Mena (Burgos), Tesorero de rentas provinciales, en 1783; Francisco Ortiz y Soto Soto y García, natural de Vera (Almería) y originario de Quesada (Jaén), Capitán de Regimiento Provincial de Lorca, en 1802; Francisco Ortiz de Taranco y Areche de laPresilla y Bringas, natural de Partearroyo, en el valle de Mena (Burgos), en 1815 Manuel Ortiz de Taranco y Vallejo Vallejo y Sáinz de Baranda, natural de Villanueva, del valle de Mena, Intendente de Asturias, en 1834; José Ortiz de la Torre y Sáenz Pardo Ortiz de Rueda y Revuelta, natural de San Miguel de Luena, de valle de Toranzo (Cantabria), en 1839, y Pedro Ortiz de Zugasti y Pérez Delgado Borras Tallavia y García, natural de Madrid, Cónsul de España en Argel, en 1828.
Ante la Sala de los Hijosdalgo de la Real Chancillería de Valladolid en los años que se indican: Adriano Ortiz, natural de Yebra, en 1816; Agustín Ortiz, vecino de San Felices, en el valle de Buelna (Cantabria), en 1756; Alonso Ortiz, vecino de Lerma (Burgos), en 1533; Alonso Ortiz, vecino de Valladolid, en 1553; Alonso Ortiz, vecino de Hoz y Marrón (Cantabria), en 1610; Andrés Ortiz, vecino de Pancorbo (Burgos), en 1537; Andrés Ortiz, vecino de Ameyugo (Burgos), en 1546 Andrés Ortiz, vecino de Viguera (La Rioja), en 1552; Andrés Ortiz, vecino de Madrid, en 1563; Andrés Ortiz, vecino de Alcorcen (Madrid), en 1587; Andrés Ortiz, vecino de Prados, de la jurisdicción de Cudeyo (Cantabria), en 1745; Andrés Ortiz, vecino de Ortigosa de Cameros (La Rioja), en 1782; Andrés Ortiz, vecino de Saro, en el valle de Carriedo (Cantabria), en 1801; Ángel y Antonio Ortiz, vecinos de Viaña, en el valle de Cabuémiga (Cantabria), en 1796; Anselmo Ortiz, vecino de Vivanco, en el valle de Mena (Burgos), en 1781; Antonio Ortiz, vecino de Villaldemiro (Burgos), en 1561; Antonio Ortiz, vecino de Pamames, en 1723 Antonio Ortiz, vecino de San Bartolomé, en el valle de Soba (Cantabria), en 1735 Antonio Ortiz, vecino de Villasuso, en el valle de Mena (Burgos), en 1807; Baltasar Ortiz, vecino de Valladolid, en 1553; Bernardo Ortiz, vecino del Concejo de San Andrés de Luena, en el valle de Toranzo (Cantabria), en 1762; Casimiro Ortiz vecino de Ayuelas (Burgos), en 1814; Catalina Ortiz, vecina de Villaldemiro (Burgos), en 1561; Cristóbal y Diego Ortiz, vecinos de Moraleja de En medio (Madrid), en 1607; Cristóbal Ortiz, vecino de Vitoria (Álava), en 1777; Cristóbal Ortiz, vecino de Urbina de Eza, en el valle de Cuartango (Álava), en 1779; Diego Ortiz, vecino de Villaescusilla, en 1543; Diego Ortiz, vecino de Móstoles (Madrid) en 1550; Diego Ortiz, vecino de Roa (Burgos), en 1558; Diego Ortiz, vecino de Cobarrubias (Burgos), en 1577; Diego Ortiz, vecino de Alcorcen (Madrid), en 1587; Diego Ortiz, vecino de Casalarreina (La Rioja), en 1629; Diego Ortiz, vecino de Porrino (Pontevedra), en 1764; Diego Ortiz, vecino de Ortigosa de Cameros (La Rioja), en 1782; Domingo Ortiz, vecino de Saelices (Cuenca), en 1661; Domingo Ortiz, vecino de San Roque de Ríomiera y Liéganes (Cantabria), en 1717; Domingo Ortiz, vecinos de Bustancilles, en el valle de Soba (Cantabria), en 1762; Domingo Ortiz, vecino de Castrillo, en 1806; Felipe Ortiz, vecino de San Bartolomé, en el valle de Soba (Cantabria), en 1735; Felipe Ortiz, vecino de San Pedro del Romeral (Cantabria), en 1762; Felipe Ortiz, vecino de Ucieda, en el valle de Cabuérniga (Cantabria), en 1815; Fernando Ortiz, vecino de Yebra (Guadalajara), en 1648; Francisca Ortiz, vecina de Valdemurillo (Segovia), en 1538; Francisco Ortiz, vecino de Adanero (Avila), en 1527; Francisco Ortiz, vecino de Ventosilla, en 1547; Francisco Ortiz, vecino de Salamanca, litigó con Castellanos de Moriscos (Salamanca), en 1559; Francisco Ortiz, vecino de Villalbos (Burgos), en 1563; Francisco Ortiz, vecino de Castrojeriz (Burgos), en 1567; Francisco Ortiz, vecino de Masueco (Salamanca), en 1580; Francisco Ortiz, vecino de Moraleja de Enmedio (Madrid), en 1607; Francisco Ortiz, vecino de Sotodosos (Guadalajara), en 1611; Francisco Ortiz, vecino de Casalarreina (La Rioja), en 1629; Francisco Ortiz, vecino de Haedo de las Pueblas (Burgos), en 1731; Francisco Ortiz, vecino de Buerres, del Concejo de Colunga (Asturias), en 1751; Francisco Ortiz, vecino de Bustancilles, del valle de Soba (Cantabria), en 1762; Francisco Ortiz, vecino del Concejo de San Andrés de Luena, del valle de Toranzo (Cantabria), en 1762; Francisco Ortiz, vecino de Urbina de Eza, en el valle de Cuartango (Álava), en 1779; Francisco Ortiz, vecino de Pie de Concha (Cantabria), en 1782; Gabriel Ortiz, vecino de Moraleja de Enmedio (Madrid), en 1607; Gregorio Ortiz, vecino de Santa María de Mercadillo (Burgos), en 1540; Gregorio Ortiz, vecino de Coria (Cáceres) y natural de Tamarón (Burgos), en 1601; Gregorio Ortiz, natural de Espinosa de los Monteros (Burgos) y vecino de Villaverde, en el valle de Soba (Cantabria), en 1805; Hernando Ortiz, vecino de Valdestillas (Valladolid), en 1544; Jacinto Ortiz, vecino de Urbina de Eza, en el valle de Cuartango (Álava), en 1779; Jerónimo Ortiz, vecino de Matalebreras (Palencia), en 1652; Jerónimo Ortiz, natural de Villanueva del Conde (Salamanca) y vecino de Ayuelas (Burgos), en 1814; José Ortiz, vecino de Cigales (Valladolid), en 1738; José Ortiz Bustancilles, en el valle de Soba (Cantabria), en 1762; José Ortiz, vecino de Busto, en 1778; José Ortiz, vecino de Villaverde de Abajo (León), en 1783; José Gabino Ortiz, natural de Bañuelos de Bureba (Burgos) y vecino de Ezcaray (La Rioja), en 1830; Juan Ortiz, vecino de Falencia, en 1529; Juan Ortiz, vecino de Cervera, en 1530; Juan Ortiz, vecino de Villalbos (Burgos), en 1543; Juan Ortiz, vecino de Mazuelo (Burgos), en 1543; Juan Ortiz, vecino de Alfaro (La Rioja), en 1547; Juan Ortiz, vecino de Medina de Rioseco (Valladolid), en 1550; Juan Ortiz, vecino de Golpejas, tierra de Ledesma (Salamanca), en 1576; Juan Ortiz, vecino de Yebra, en 1596; Juan Ortiz, vecino de Quejo, en el valle de Valdegovía (Álava), en 1597; Juan Ortiz, vecino de Haedo de las Pueblas (Burgos), en 1731; Juan Ortiz, vecino de Buerres, en el Concejo de Colunga (Asturias), en 1751; Juan Ortiz, natural de Zangandez y vecino de Navas, en la Merindad de Bureba (Burgos), en 1825; Juan Francisco Ortiz, vecino de Urbina de Eza, en el valle de Cuartango (Álava), en 1779; Juan Ortiz, vecino de Pie de Concha (Cantabria), en 1782; Juan Ortiz, vecino de Ortigosa de Cameros (La Rioja), en 1782; Juan Antonio Ortiz, vecino de San Bartolomé, en el valle de Soba (Cantabria), en 1735; Juste Ortiz, vecino de Paredes de Nava (Palencia), en 1581; Lázaro Ortiz, vecino de Zamora, en 1526; Leonardo Ortiz, vecino de Cilleruelo (Burgos), en 1730; Lope Ortiz, vecino de Roa (Burgos), en 1558; Lope Ortiz, vecino de Guzmán (Burgos), en 1577; Luis Ortiz, vecino de Palencia, en 1529; Manuel Ortiz, vecino de Valdestillas (Valladolid), en 1525; Manuel Ortiz, vecino de Moraleja de Enmedio (Madrid), en 1607; Manuel Ortiz, vecino de Matienzo, en 1730; Manuel Ortiz, vecino de Horcajo de las Torres (Avila), en 1744; Manuel Ortiz, vecino de Prados, de la jurisdicción de Cudeyo (Cantabria), en 1745; Manuel Ortiz, vecino de Cuevacardel, natural de Briviesca (Burgos), en 1756; Manuel Ortiz, vecino de Vejoris y San Pedro de Romeral (Cantabria), en 1762; Manuel Ortiz, vecino de Ortigosa de Cameros (La Rioja), en 1782; Manuel Basilio Ortiz, vecino de Móstoles (Madrid), en 1784 Manuel Dionisio Ortiz, vecino de Cádiz y natural de San Pedro del Romera (Cantabria), en 1774; Marcos Ortiz, vecino de Cornudilla, en 1574; Marcos Ortiz vecino de Liérganes (Cantabria), en 1761; María Ortiz, vecina de Almajano (Soria; en 1533; María Ortiz, vecina de Villaldemiro (Burgos), en 1561; Marina Ortiz vecina de San Juan de Ortega (Burgos), en 1543; Martín Ortiz, vecino de Villaescusa, en 1543; Martín Ortiz, vecino de Urbina de Eza, en el valle de Cuartango (Álava), en 1779; Mateo Ortiz, vecino de Vejoris (Cantabria), en 1762 Melchor Ortiz, vecino de Valladolid, en 1553; Miguel Ortiz, vecino de Valdestilla (Valladolid), en 1544; Miguel Ortiz, vecino de Alfaro (La Rioja), en 1547; Miguel Ortiz, vecino de San Miguel de Cerrezuela, en 1563; Pedro Ortiz, vecino de Marat (Cataluña), en 1518; Pedro Ortiz, vecino de Pancorbo (Burgos), en 1525; Pedro Ortiz, vecino de Zabala, en 1527; Pedro Ortiz, vecino de Valdemorillo (Segovia), en 1538; Pedro Ortiz, vecino de San Juan de Ortega (Burgos), en 1543; Pedro Ortiz vecino de Contreras (Burgos), en 1548; Pedro Ortiz, vecino de Mazuelo (Burgos), en 1552; Pedro Ortiz, vecino de Villaldemiro (Burgos), en 1559-1561; Pedro Ortis vecino de Quejo, en el valle de Valdegovía, en 1597; Pedro Ortiz, vecino de La Loma y natural de Saelices, en 1611; Pedro Ortiz, vecino de Salinas de Rosío (Burgos), en 1763; Pedro Ortiz, vecino de Vega de Pas y vecino de Reocín (Cantabria), en 1816; Rafael Ortiz, vecino de Valdestillas (Valladolid), en 1544; Ramón Ortiz, natural de Pando y vecino de Ribota, en 1831; Rodrigo Ortiz, vecino de Nava, de la jurisdicción de Roa (Burgos), en 1513; Rodrigo Ortiz, vecino de Valdemorillo (Segovia), en 1538; Rodrigo Ortiz, vecino de Lerma (Burgos), en 1577; Rudesindo Ortiz, vecino de Ortigosa de Cameros (La Rioja), en 1782; Sanchez Ortiz, vecino de Alba de Tormes (Salamanca), en 1575; Sancho Ortiz, vecino de Ribarredonda y La Loma (Guadalajara), en 1589; Santiago Ortiz, vecino de Santibáñez, del valle de Carriedo (Cantabria), en 1761; Santiago Felipe Ortiz natural de Ordejón y vecino de Bóveda de la Ribera (Burgos), en 1831; Teresa Ortiz, vecina de Atapuerca (Burgos), en 1543; Tomás Ortiz, vecino de Haedo de la Pueblas (Burgos), en 1731; Tomás Ortiz, vecino de Prados, de la jurisdicción de Cudeyo (Cantabria), en 1745; Tomás Ortiz, vecino de Bustancilles, del valle de Soba (Cantabria), en 1762; Urban Ortiz, vecino de Valdestillas (Valladolid), en 1525 Vicente Ortiz, vecino de Adanero (Avila), en 1577; Vicente Ortiz, vecino de Ortigosa de Cameros (La Rioja), en 1782; Antonio Ortiz Barona, vecino de Ramale (Cantabria), en 1725; Francisco Ortiz Barona, vecino de San Pedro del Romenal (Cantabria), en 1824; Francisco Ildefonso Ortiz Barona, natural y vecino de Ruiseña (Cantabria), en 1828; Juan Ángel Ortiz Caballero, natural de Terminen (Burgos) vecino de Burgos, en 1805; Diego Ortiz Calderón de Quirós, vecino de Cifuentes (Guadalajara), en 1561; Domingo Ortiz Carranza, Capitán de Alabarderos de lo Virreyes del Nuevo Reino de Granada, natural de Bañuelos de Bureba (Burgos) vecino de Ezcaray (La Rioja), en 1830; Matías Ramón Cesáreo Ortiz Covarrubia; natural y vecino de Salas de los Infantes (Burgos), en 1804; Lorenzo Ortiz Crespo vecino de Coicillos, en la jurisdicción de Torrelavega (Cantabria), en 1785; Baltasar Ortiz Encio, vecino de Barcina de los Montes (Burgos), en 1797; José Ortiz Encio vecino de Bozoo (Burgos), en 1795; Manuel Ortiz Encio, natural de Orón y vecino de Miranda de Ebro (Burgos), en 1731; Miguel Ortiz Encio, vecino de San Asencio (La Rioja), en 1764; Manuel Ortiz Farfán y Moscoso, vecino de Algete (Madrid), en 1786; Diego y José Ortiz García de Lavín, vecinos de Barcenas de Espinosa (Burgos), en 1747; Casiano Ortiz Gómez, natural de Cueva Cardiel (Burgos) y vecino de Quintanilla de Morocisla, en 1805; Juan Manuel Ortiz González, vecino de Escobedo, en la jurisdicción de Camargo (Cantabria), en 1794; Sebastián Ortiz Hidalgo, vecino de Ledesma (Valladolid), en 1580; Manuel Ortiz Madrazo, vecino de Ramales, en la Junta de Parayás (Cantabria), en 1762; Fernando Ortiz Maza, vecino de Liérganes (Cantabria), en 1780; Manuel Ortiz Mazpule, vecino de Ojebar (Cantabria), en 1728; Agustín Ortiz y Ogazón, vecino de Hedesa, de la Merindad de Montija (Burgos), en 1772; Felipe María Ortiz y Ortiz, vecino de Calatañazor (Soria), en 1814; Francisco Ortiz y Oviedo, natural de Sinales (Burgos) y vecino de Villanueva del Conde (Salamanca), en 1832; Juan José Ortiz y Oviedo, vecino de Fuentebureba (Burgos), en 1799; Pedro Ortiz Quejo, vecino de El Cabo (Asturias), en 1501; Juan Ortiz Revuelta, vecino del Condado de Talas (Murcia), en 1702; Carlos Ortiz y Rueda, vecino de Casalarreina (La Rioja), en 1787; Miguel Ortiz Salido, vecino de Junguito, de la jurisdicción de Vitoria (Álava), en 1784; Pedro Ortiz Salido, vecino de Jocano, en el valle de Cuartango (Álava), en 1603; Tomás Ortiz Saro, vecino del valle de Hoz y natural de Espinosa de los Monteros (Burgos), en 1741; Miguel Ortiz y Sierra, vecino de Gibaja, de la Junta de Parayás (Cantabria), en 1776; Julián Ortiz Sodupe, vecino de Navas de Bureba (Burgos), en 1776; José Ortiz Solares, vecino de Entrambasaguas, en el valle de Toranzo (Cantabria), en 1773; Juan Antonio Ortiz Torres, vecino de Santa Cristina, de la jurisdicción de Benavente (Zamora), en 1731, y Tomás Ortiz Vaca, vecino de Burgos, en 1606.
Ante la Real Chancillería de Granada probaron su nobleza: Alonso Ortiz, vecino de Almendralejo (Badajoz), en 1550-1567; Alonso y Francisco Ortiz, vecinos de Azuaga (Badajoz), en 1569; Ana Ortiz e hijos, vecinos de Hinojosa (Guadalajara), en 1573; Diego Ortiz, vecino de Almendralejo (Badajoz), en 1512; Diego Ortiz, vecino de Bienvenida (Badajoz), en 1582; Diego Ortiz e hijos, vecinos de Fuenllana (Ciudad Real), en 1562; Diego Ortiz, vecino de Herrera de Guadalupe, en 1699; Diego Ortiz, vecino de Llerena, en 1515-1518; Diego Ortiz, natural de Beci (Vizcaya) y vecino de La Mota del Cuervo (Cuenca), en 1526; Fernando, Juan y Diego Ortiz, vecinos de Azuaga (Badajoz), en 1554; Fernando Ortiz, vecino de Córdoba, en 1580-1581; Francisco Ortiz, vecino de Almendralejo (Badajoz), en 1583-1585; Francisco Ortiz, el Viejo, y Diego y Francisco, el Mozo, vecinos de La Hinojosa (Cuenca), en 1582; Francisco Ortiz y su hermano, vecinos de El Quintanar (Jaén), en 1585; Francisco Ortiz, vecino de La Roda (Albacete), en 1546; Gabriel y Pedro Ortiz, vecinos de Ocaña (Toledo), en 1566; Gaspar Ortiz, vecino de Almendralejo (Badajoz), en 1559; Gómez y Alonso Ortiz, vecinos de Ocaña (Toledo), en 1528; Gonzalo Ortiz, vecino de Alhambra (Ciudad Real), en 1587; Gonzalo Ortiz, vecino de Zalamea, en 1552-1557; Hernando Ortiz, vecino de Azuaga (Badajoz), en 1565; Hernando y Juan Ortiz, vecinos de Azuaga (Badajoz), en 1658; José Francisco y Fernando Ortiz, vecinos de Cádiz, en 1786; Juan Ortiz, vecino de Palos y San Juan del Puerto (Huelva), en 1698; Luis Ortiz, vecino de Alhendín (Granada), en 1802-1803; Luis y Francisco Ortiz, vecinos de El Quintanar (Jaén), en 1568; Miguel Ortiz, vecino de La Puebla de Almoradiel (Toledo), en 1532; Pedro Ortiz, vecino de Azuaga (Badajoz), en 1553; Pedro Ortiz, vecino de Córdoba, en 1517; Pedro Ortiz, el Menor, vecino de El Toboso (Toledo), en 1699-1700; Pedro Ortiz, vecino de Vilar del Maestre (Cuenca), en 1545-1548; Tomás y Ramón Ortiz, vecinos de Puerto de Santa María (Cádiz), en 1765; Pedro Ortiz Abellán, vecino de Alcalá del Río Júcar (Albacete), en 1790; Manuel Ortiz y Abreu, vecino de Villalba, en 1733; Juan Ortiz Abreu González, vecino de San Juan del Puerto (Huelva), en 1592; Juan Ortiz de Abreu y Zambrana, vecino de Niebla, en 1683; Juan Ortiz Aguado de Molina de León y Alcázar, vecino de Jaén, en 1772; Francisco y Diego Ortiz Ayala Oñate, vecinos de La Hinojosa (Cuenca), en 1588; José Ortiz Cabeza y Tovar, vecino de Ribera del Fresno (Badajoz), en 1779; Juan Ortiz Campoy y consortes, natural de Vélez-Blanco (Almería) y vecino de El Arahal (Sevilla), en 1620; Antonio José Ortiz Cózar y Moreno, vecino de Baeza (Jaén), en 1784; Pedro Francisco y Santiago Ortiz Fernández, vecinos de Almendralejo (Badajoz), en 1792; Pedro Ortiz Fernández Nieto Guerrero, vecino de Almendralejo (Badajoz), en 1792; Santiago, Ignacio y Pedro Ortiz Fernández Nieto, vecinos de Almendralejo (Badajoz), en 1796; Alonso Ortiz Guerrero, vecino de Mérida (Badajoz), en 1737; Diego, Felipe, Gonzalo y Pedro Ortiz Guerrero, vecinos de la Zarza de Alange (Badajoz), en 1773-1798; Pedro Ortiz Guerrero, vecino de la Zarza de Alange (Badajoz), en 1777; Diego y Fernando Ortiz Hidalgo, vecinos de Azuaga (Badajoz), en 1552-1554

Armas. Descripción de los escudos, conforme a las leyes de la heráldica:
Los Ortiz de las casas de Espinosa de los Monteros, Medina de Pomar, valle de Mena, Lences, Poza de la Sal y otras de la provincia de Burgos, traían: En campo de azur, una estrella de ocho puntas de oro. Bordura de plata, con ocho rosas de gules.
Esas mismas armas usaron otras casas de Ortiz en Castilla la Vieja, entre ellas la de Medina del Campo (Valladolid), y también las del valle de Carriedo (Cantabria) y valle de Carranza (Vizcaya) y la que radicó en el valle de Gordejuela (Vizcaya).
Algunos Ortiz castellanos y los de Extremadura ostentaron dicho escudo sin la bordura, o sea: En campo de azur, una estrella de ocho puntas de oro.
Los de la casa solar de la villa de Riaño, en la provincia de León, y otros en Galicia, y algunas ramas de las casas burgalesas y de la Montaña de Santander, acrecentaron el primer blasón descrito, con una segunda bordura jaquelada de plata y gules.
Estas mismas armas traen los del valle de Guriezo (Cantabria) y sus radicados en Córdoba (Argentina). Otros, reduciendo a una sola la bordura del repetido escudo, la pintaron jaquelada de plata y gules, cargando cada pieza de plata, de una rosa de gules.
Los originarios de Santander, radicados en Valencia y Filipinas: En campo de oro, un árbol de sinople y un oso de sable, empinado al tronco. Bordura de gules, con una espada de plata, encabada de oro, puesta en jefe.
También ostentaron varias casas del valle de Mena, en la provincia de Burgos, y del valle de Carriedo, en la de Cantabria: En campo de azur, un león rampante de oro, surmontado de una estrella del mismo metal. Bordura de plata (no de oro, como dicen algunos heraldistas), con ocho rosas de gules.
La familia Ortiz originaria del valle de Carriedo y radicada en la villa de Almendralejo (Badajoz) y también otras que pasaron de Castilla la Vieja a Andalucía, así como la establecida en el Concejo de Colunga (Asturias), usaron esas armas.
En una certificación de blasones librada en 1736 por Juan Alfonso de Guerra y Sandoval referente a la casa de Colunga, suprime, creemos que indebidamente, la estrella que surmonta al león.
Fernández Bethencourt, hablando del caballero Lope Ortiz que pasó a Canarias, originario e hijodalgo notorio de la villa de Espinosa de los Monteros (Burgos), dice que su escudo era: En campo de gules, un león rampante de oro, acompañado a la diestra de un lucero de oro.
Los de Burgos: Escudo cortado: 1°, en campo de plata, un lobo de gules, y 2°, en campo de oro, un árbol de sinople, terrasado de lo mismo.
Los originarios de Burgos, radicados en Asturias y pasados a Perú: En campo de azur, un león rampante de oro, surmontado de una estrella de seis puntas, del mismo metal. Bordura de plata, con ocho rosas talladas de gules.
Los radicados en Villaldemiro (Burgos) y extendidos a México: En campo de oro, un martillo de azur, encabado de plata.
Los apellidados Ortiz de Paules, en el mismo valle de Carranza, tenían, según Juan de Mendoza: En campo de oro, un árbol de sinople, y un lobo de sable pasante y atravesado al pie del tronco.
Otros, también en Vizcaya: En campo de oro, un árbol de sinople, y dos lobos de sable pasantes y atravesados al pie del tronco. Bordura de gules, con una cadena de oro.
Los del lugar de Ororbia, en Navarra: Cuartelado: 1° y 4°, en campo de plata, un lobo pasante de sable, y 2° y 3°, en campo de gules, una flor de lis de oro (Escudo 30.)
Los Ortiz de Laminoria en Alava: ""Un perro, con su collar, pegado o arrimado a un árbol"".
Así las describe la Nobleza Executoriada de Navarra, pero omite los esmaltes.
Los radicados en Irún (Guipúzcoa): En campo de sinople, un castillo de oro, y asomado en su homenaje un caballero de plata, con un estandarte en la diestra de gules.
Los de las casas de las ciudades de Valencia, Elche, Orihuela, Nobelda y otras localidades del Reino de Valencia, traen: En campo de oro, un brazo con armadura de plata y moviente del flanco siniestro, apretando con la mano un manojo de ortigas de sinople.
En Aragón ostentaron algunas casas de este apellido: En campo de oro, una cruz llana de sable.
Los de la villa de Tauste (Zaragoza): Escudo cuartelado: 1° y 4°, en campo de oro, tres fajas de gules, y 2° y 3°, en campo de oro, una panela de gules, sumada de tres flores de azucena de su color.
Los de la casa del lugar de Pilzán (Huesca) que entroncaron con los Eril: En oro, un león rampante de gules, coronado y linguado del mismo color. Escudo que aparece en el portal del castillo de Pilzán y en las sepulturas de su parroquia.
Los Ortiz del lugar de Concabella en la provincia de Lérida, usaron primero: En campo de oro, tres fajas de azur.
Después acrecentaron esas armas en esta forma: Cuarteladas: 1° y 4°, en campo de oro, tres fajas de azur, y 2° y 3°, en campo de plata (otros de oro), una banda de sable, y brochante sobre ella una cadena de azur, puesta en situación de orla.
Otros Ortiz aragoneses: En campo de oro, una lisa o rastrillo de sable.
Los de la casa de Barcelona que se apellidaron Ortiz Repiso: En campo de sinople, un castillo de plata, sostenido por dos leones de oro rampantes, afrontados y coronados del mismo metal. En el jefe, tres estrellas de plata, puestas en situación de faja.
Otros Ortiz catalanes, oriundos de Castilla, y también con casa en Barcelona: En campo de azur, un león rampante de oro, armado y linguado de gules. Bordura de plata, con ocho rosas de gules. O sea las mismas de las casas de los Valles de Mena y Carriedo, descritas en anteriores líneas, con la supresión de la estrella que surmonta
el león.
Los originarios de Castilla y radicados en Madrid y México: En campo de gules, dos cabríos apuntados de oro.
Los de Asturias traen: En campo de azur, un león rampante de oro. Bordura de plata, con ocho rosas de gules.
Los de Extremadura: En campo de sinople, cinco torres de oro, almenadas y mazonadas de sable, puestas en aspa.
Los de Andalucía: En campo de oro, un árbol de sinople, y apoyado a él una escala, a la diestra, y una lanza, a la siniestra.
Otros de Andalucía: En campo de oro, una montaña de sinople, cargada de una torre de plata.
Los radicados en Sevilla: En campo de plata, un árbol de sinople, sostenido por un vuelo de azur. Bordura de gules, con ocho aspas de oro.
Los radicados de Sevilla, pasados a México y Estados Unidos: En campo de oro, unas tijeras de esquilo de azur.
Los radicados en Revenga: En campo de sinople, un guerrero de plata, que le faltan los brazos y con la boca sostiene el asta de una bandera de gules.
Los radicados en Madrid: En campo de plata, cinco veneras de gules, puestas en aspa.
Los radicados en Vítores: Sobre ondas de azur y plata, un cisne de plata.
En Portugal usaron los Ortiz el escudo que hemos descrito en primer lugar. Y también éste: En campo de sinople, una torre de plata con homenaje, y dos lobos de sable empinados a sus muros.
El Emperador Don Carlos I concedió, por privilegio dado en Madrid a 8 de Junio de 1540, el siguiente escudo de armas a Juan Ortiz, vecino de Cuzco (Perú): En campo de gules, una torre de oro, y, saliendo de su homenaje, un brazo armado, de plata, empuñando una bandera de sinople, perfilada de oro.
Otros: En campo de oro, una estrella de azur. Bordura de plata, con ocho rosas de gules y una segunda bordura componada de gules y plata.
En campo de oro, una estrella de azur, bordura de plata, con ocho rosas de gules. una segunda bordura componada de gules y plata.
Otros: Escudo de azur y un lucero de oro. Bordura de jaqueles de oro y plata, cargados de una rosa cada uno.
Otros traen: en campo de gules, un león rampante, de oro, acompañado a la diestra de un lucero del mismo metal.
Los de Extremadura traen: en campo de azur, un lucero de oro.
El Emperador D. Carlos I concedió, por privilegio dado en 8 de junio de 1540, el siguiente escudo de armas a D. Juan Ortiz, vecino de Cuzco: en campo de gules, una torre de oro, y, saliendo de su homenaje, un brazo armado, de plata, empuñando una bandera de sinople, perfilada de oro.
La casa de Ortiz en la villa de Gordejuela (Vizcaya): De azur, con una estrella de oro. Bordura de plata con ocho rosas de gules.

 Escudo apellido Ortiz

Simbología de las armas:
Teniendo en cuenta la indumentaria que en la Edad Media vestían los caballeros en la batalla (armadura, celada, etc.), y que los hacía irreconocibles, resultaba necesario buscar un método de identificación y distinción entre los contendientes, que fuera revelador, preciso y rápido a una cierta distancia. De ahí surge la fórmula de exhibir en sus escudos tinturas, emblemas, etc., que los diferenciase de forma inequívoca y singular en el campo de batalla. Por eso la simbología heráldica, en su origen, buscaba formas y colores que fuesen notorios y permitiesen distinguir a sus portadores de un golpe de vista. Tal vez es exagerada la tendencia de algunos autores de dar significado o contenido a todos los emblemas (piezas, muebles, etc.) y esmaltes heráldicos, aún así hay varios tratados que estudian la simbología de los blasones de forma muy exhaustiva, entre ellos: "Ciencia Heroyca", de Don José de Avilés. Año 1725 y "Adarga Catalana", de Don Francisco Xavier de Garma y Duràn. Año 1753
Por las Leyes de la Heráldica, cuantos lleven el oro en sus escudos están obligados a hacer el bien a los pobres y a defender a sus príncipes, péleando por ellos hasta su última gota de sangre. El oro simboliza el topacio. En las armerías de los reyes se le llama "sol", en las de los nobles con título de Duque, Marqués, Conde, etc, "topacio" y en el de la nobleza en general "oro". En su relación con los astros el oro es el Sol de los doce signos del Zodiaco, Leo
La plata en las armerías recibe el nombre de Luna, en lo que se refiere a las de los soberanos en las de los títulos, perla, y en las de los restantes nobles, plata.
El color rojo, denominado en Heráldica, gules, simboliza el valor, la intrepidez y la valentía. Aquellos que llevan este color en sus blasones tienen la obligación de socorrer, amparar y defender, a los injustamente oprimidos. Representa al rubí, y en lo que se refiere a los signos del Zodiaco corresponde a Marte, Aries y Escorpio como elemento, el fuego.
El esmalte azul (azur) simboliza la realeza, la serenidad y la hermosura. Los que los lleven en sus armas, están obligados a socorrer a los fieles servidores de sus príncipes que "se hallan sin remuneración por sus servicios". En las piedras preciosas representa al zafiro y en los signos del Zodiaco a que se encuentra sujeto son Tauro y Libra. Su elemento es el aire su metal, el acero
El esmalte sinople es el verde. Su significado es la esperanza, la abundancia y la libertad cuantos llevan este esmalte en su escudo quedan obligados a socorrer a los labradores en general y a los huerfanos y pobres que se encuentren oprimidos. Su signo zodiacal corresponde a Mercurio.
El ala representa a las alas del águila, simbolizando la libertad, dada sus ansias de volar y surcar los cielos.
La armadura es símbolo de defensa y seguridad.
El sotuer o aspa se trae a las armerías españolas por la batalla de Baeza, ganada contra los moros el día de San Andrés del Año de 1227, que es la forma de la Cruz en que estuvo este Santo Apostol en su martirio.
La azucena simboliza la pureza, caracterizada tanto por su delicada hermosura como por la suave fragancia que desprende mas si la manosean, esta fragancia torna en desapacible olor que exige vindicación contra el ultraje recibido. Esta asociada al noble arte de la caballería, apareciendo como símbolo de la Orden de la Azucena, fundada en el año 1413 por el rey Fernando I de Aragón.
La banda significa el tahalí del caballero, y la banda que traían atravesada del hombro diestro al flanco siniestro, y por eso se expresa en esta situación en el escudo, habiéndola puesto por armas muchos de los que fueron a las cruzadas, según el color con que se distinguian las naciones.
La bandera es la señal o insignia con que se distingue a un cuerpo de tropa. Símbolo de poder y de señorío sobre huestes y vasallos. La bandera se usaba mas en timbres que como divisa del escudo, sin embargo, dentro del blasón suele proceder de caballeros que pertenecieron a la Orden Militar "Caballería de la Razón", que fundó Don Juan I, rey de Castilla, en el año 1385, usando como divisa un estandarte.
El estandarte es la señal o insignia con que se distingue a un cuerpo de tropa. Símbolo de poder y de señorío sobre huestes y vasallos. La bandera se usaba mas en timbres que como divisa del escudo, sin embargo, dentro del blasón suele proceder de caballeros que pertenecieron a la Orden Militar "Caballería de la Razón", que fundó Don Juan I, rey de Castilla, en el año 1385, usando como divisa un estandarte.
La bordura simboliza protección, favor y recompensa así mismo la cota que vestían los caballeros para la guerra y que al salir de la pelea, ostentándola manchada de sangre enemiga, eran premiados con el añadido de la bordura de escudo, como insignia de valor. La bordura también se usa para combinar armerías, con la particularidad que las armas situadas en la bordura tienen siempre carácter secundario.
El brazo simboliza la fortaleza.
El caballero simboliza la nobleza. En los comienzos de la Edad Moderna, era "soldado de caballería, que servia a su costa con armas y caballo". Desde el reinado de Felipe III, Caballero es el "Hidalgo de Nobleza reconocida".
El cabrio o chevrón representa las botas y espuelas del caballero, concediendose ésta pieza en Armería a los que salen heridos en las piernas, aunque muchos la tienen por símbolo de protección.
Las familias españolas, que traen cadenas en su blasón, es por la batalla de las Navas, en la que se rompió el palenque de Miramomelín, guarnecido de gruesas estacas y cadenas muy fuertes
Los castillos son geroglífico de grandeza, y de elevación, porque ellos exceden en hermosura, en fortaleza, y en magnitud a todos los demas edificios: denota también el asilo, y la salvaguardia.
La cruz es una pieza honorable, que representa la espada del caballero, dándose en Armería al combatiente que sacaba la espada teñida de sangre de sus enemigos. Del tiempo de las cruzadas quedaron algunas familias con la cruz por armas, para denotar que habían estado en ellas.
La casa solariega, también llamada solar, casa fuerte, casa palacio, casa torre, casona, casal, etc., es el símbolo de las antiguas libertades de los nobles, caballeros e hidalgos, notoriedad y nobleza.
El cisne simboliza por la tradición de que canta dulcemente cuando va a morir, antigua hidalguía, sin mancha de ningún género, que muere valerosamente ejecutando gloriosas empresas.