Antiguo apellido de Aragón, con casa solar en Zaragoza y extendido por Cataluña y Baleares. Léese que el fundador de este linaje fue un hidalgo guipuzcoano llamado Luis de Elisalte, que pasó a vivir a Zaragoza e hizo allí su asiento. La causa que motivó su cambio de apellido, según la explican algunos autores, tiene todos los caracteres de una fábula, que no queremos recoger. Lo cierto es que la casa de este linaje en Zaragoza y sus ramas de Aragón, Cataluña y Baleares florecían ya en principios del siglo XV. El caballero aragonés llamado Sancho de la Caballería, fue el que llevó el y pellido al reino de Mallorca en fines del siglo XVI, y fue descendiente suya Leonardo de la Caballería, mallorquín muy distinguido, que en 1420, siendo secretario del rey don Alonso V de Aragón, fue enviado a Cerdeña para conferenciar con el marqués de Oristañy sobre negocios de importancia. Martín de la Caballería y Moig, era caballero de Santiago en 1463, y pasó con una galera suya a la armada capitaneada por Francisco Burgues, consiguiendo expulsar a los catalanes de Menorca. Continuó después sus servicios en las costas de Cataluña, y obtuvo por ellos en 1466 privilegio perpetuo de caballero. En 1506 acompañó al rey Fernando a Nápoles, y más tarde, en la azarosa época de los comuneros, y siendo ya muy viejo, prestó su caudal para atender a las graves urgencias de la patria. En el claustro de la Cartuja de Valldemosa (villa del partido judicial de Palma), existió hasta el pasdo siglo un epitafio que decía: «Honorabilis Martini de la Caballería filü Ferdinandi et suorum). Felipe de la Caballería sirvió como capitán en las guerras de Flandes, y en 1580 era alcaide del castillo de Santueri, en Felanitx, villa del partido judicial de Manacor. Diego de la Caballería, doctor en ambos Derechos, era uno de los mejores letrados del siglo XVI. Fue regente de Milán. Alonso de la Caballería desempeñaba en 1602 la alcaldía del castillo de Bellver, villa del partido judicial de Seo de Urgel (Lérida). Pedro de la Caballería fue en 1628 alcaide del castillo de Santueri, y en 1656 le sustituyó su hijo Felipe. Raimundo de la Caballería era señor del mayorazgo y casa de la Caballería en la ciudad de Palma de Mallorca en fines del siglo XVII, y fue padre de Francisco de la Caballería, que en el año de 1748 era capitán del regimiento de infantería española de Africa. Acabó esta familia en Mallorca en Ramón de la Caballería y Suau de Veintimillas, y sucedió en sus mayorazgos en el pasado siglo don Mariano Orlandis y Dezcallar, por su abuela paterna, doña Catalina de la Caballería y Suau de Veintimillas, esposa de Francisco Orlandis y Cisternas.
Escudos de Armas del apellido:
En Aragón, ostentan solamente: En campo de azur, el caballo de plata levantado y sillado de gules, y bordura componada de oro y gules. Los de Mallorca tienen esas mismás armas sin la bordura. Algunos, en Cataluña, pintan el campo de gules y el caballo de plata sillado de azur. Hay tratadistas que afirman que de la casa de la Caballería es originaria la familia italiana del «Caballieri», y que ésta trae: De gules, con una faja de oro, acompañada en lo alto de una rosa de plata, y en lo bajo del caballo de plata levantado y sillado de gules. Desconocemos el fundamento de esa afirmación, y es de tener en cuenta que otros autores manifiestan que los Caballieri no proceden del linaje de la Caballería y, en cambio, los que dimanan de los Caballieri italianos son algunos del apellido «Caballero», en España. El escudo, en heráldica, es el soporte físico del blasón, al centro de las armerías. En la panoplia que representa el blasón, el escudo propiamente dicho representa el escudo de los hombres de armas. Las armas son generalmente presentadas sobre un escudo pero otros soportes son posibles: una vestimenta como el tabardo del heraldo, un elemento de arquitectura como un anuncio mural, un objeto doméstico... En este caso, la forma del contorno es aquella del soporte. El escudo se materializa por la forma geométrica y sus divisiones potenciales, o mesa de espera, en la que están representadas las armas. El escudo puede tomar diferentes formas, de acuerdo al origen de su representación.
Simbología de los escudos de Armas:
Teniendo en cuenta la indumentaria que en la Edad Media vestían los caballeros en la batalla (armadura, celada, etc..), y que los hacía irreconocibles, resultaba necesario buscar un método de identificación y distinción entre los contendientes, que fuera revelador, preciso y rápido a una cierta distancia. De ahí surge la fórmula de exhibir en sus escudos tinturas, emblemas, etc.., que los diferenciase de forma inequívoca y singular en el campo de batalla. Por eso la simbología heráldica, en su origen, buscaba formas y colores que fuesen notorios y permitiesen distinguir a sus portadores de un golpe de vista. Tal vez es exagerada la tendencia de algunos autores de dar significado o contenido a todos los emblemas (piezas, muebles, etc..) y esmaltes heráldicos, aun así hay varios tratados que estudian la simbología de los blasones de forma muy exhaustiva, entre ellos: "Ciencia Heroyca", de Don José de Avilés. Año 1725; y "Adarga Catalana", de Don Francisco Xavier de Garma y Duràn. Año 1753 Por las Leyes de la Heráldica, cuantos lleven el oro en sus escudos están obligados a hacer el bien a los pobres y a defender a sus príncipes, peleando por ellos hasta su última gota de sangre. El oro simboliza el topacio. En las armerías de los reyes se le llama "sol", en las de los nobles con título de Duque, Marqués, Conde, etc., "topacio" y en el de la nobleza en general "oro". En su relación con los astros el oro es el Sol; de los doce signos del Zodiaco, Leo; de los elementos, el fuego; de los días de la semana, el domingo; de los meses del año, julio; de los árboles, el ciprés y de las flores, el girasol; de las aves, el gallo; de los cuadrúpedos, el león y de los peces, el delfín. La plata en las armerías recibe el nombre de Luna, en lo que se refiere a las de los soberanos; en las de los títulos, perla, y en las de los restantes nobles, plata; significa blancura, pureza, y los que la llevan en sus armas están obligados a defender a las doncellas y amparar a los huérfanos. La plata significa en su correspondencia con las piedras preciosas la perla. De los astros, la Luna; de los signos del Zodiaco, Cáncer, y de los elementos, el agua; de los días de la semana, el lunes; de los meses del año, los de enero y febrero; de los árboles, la palmera; de las flores, la azucena; de las aves, la paloma; y de los animales, el armiño. El color rojo, denominado en Heráldica, gules, simboliza el valor, la intrepidez y la valentía. Aquellos que llevan este color en sus blasones tienen la obligación de socorrer, amparar y defender, a los injustamente oprimidos. Representa al rubí, y en lo que se refiere a los signos del Zodiaco corresponde a Marte, Aries y Escorpio; como elemento, el fuego; el día, el martes y el mes, el de octubre; el metal, el cobre; árbol, el cedro y la flor, el clavel; de las aves, corresponde al pelícano. El gules en las armerías de los reyes y príncipes se llama Marte; en las de los títulos, rubí, y gules en la generalidad de la nobleza. El esmalte azul (azur) simboliza la realeza, la serenidad y la hermosura. Los que los lleven en sus armas, están obligados a socorrer a los fieles servidores de sus príncipes que "se hallan sin remuneración por sus servicios". En las piedras preciosas representa al zafiro y en los signos del Zodiaco a que se encuentra sujeto son Tauro y Libra. Su elemento es el aire; su metal, el acero; el día de la semana, el viernes; los meses, abril y septiembre; su árbol, el álamo; la flor, la violeta; su animal, el camaleón y su ave, el pavo real. El azur se llama Júpiter en las armerías reales, zafiro en las de los títulos y azur en la nobleza. La bordura simboliza protección, favor y recompensa; así mismo la cota que vestían los caballeros para la guerra y que al salir de la pelea, ostentándola manchada de sangre enemiga, eran premiados con el añadido de la bordura de escudo, como insignia de valor. La bordura también se usa para combinar armerías, con la particularidad que las armas situadas en la bordura tienen siempre carácter secundario. El caballo es símbolo de la guerra, representando la osadía y la rapidez en la acción. La casa solariega, también llamada solar, casa fuerte, casa palacio, casa torre, casona, casal, etc.., es el símbolo de las antiguas libertades de los nobles, caballeros e hidalgos, notoriedad y nobleza.